Miguel Ángel Fernández Ordóñez, Gobernador del Banco de España en el momento de la salida a bolsa de Bankia, ha sido finalmente imputado. Así lo ha determinado la Sala de lo penal de la Audiencia Nacional, en una acción que revoca la decisión del Juez Andreu de dejar a Ordóñez fuera de la investigación, siguiendo el criterio del fiscal anticorrupción, Antonio Luzón, quien no veía oportuno imputar a ninguno de los interventores.
También se ha incluido en la investigación a Julio Segura, el expresidente de la CNMV que, teóricamente, debería haber supervisado el salto al parqué de la entidad de forma más “rigurosa”.
Indicios múltiples concurrentes de criminalidad
El Tribunal entiende que existen “indicios múltiples, bastantes y concurrentes de criminalidad“.
La Sala en su sección tercera no sólo cuenta con múltiples correos como prueba, sino que habría tenido presente, además, los informes realizados por los inspectores del Banco de España, en los cuales se detalla la existencia de “graves y reiteradas irregularidades” en la gestión de Caja Madrid, y en los que se evidencia las “excesivamente generosas políticas retributivas y de prejubilaciones” como práctica habitual en la entidad.
Los documentos advierten, entre otros, acerca de la inviabilidad en la integración de las cajas sobre las que se fundó Bankia, y cómo el folleto de su salida a bolsa era fraudulento, según sostienen los escritos realizados por los peritos de auxilio judicial designados por el Banco de España.
También se ha acordado citar a declarar en calidad de investigados a otros responsables del Banco de España, como Pedro Comín, Mariano Herrera García-Cantauri, Pedro González, Jerónimo Martínez Tello y Javier Arístegui.
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