Según informa el diario Bild am Sonntag, Deutsche See –empresa alemana dedicada a la fabricación de productos elaborados con pescado– ha denunciado al grupo Volkswagen por el escándalo relativo a las emisiones contaminantes en varios de sus modelos diésel.
Se trata de la primera denuncia presentada por un gran cliente en Europa. La demanda se ha registrado en la Audiencia de Braunschweig (Baj Sajoniania), y exige al fabricante de automóviles 11,9 millones de euros por daños y perjuicios producidos por el Dieselgate, en los cerca de 500 vehículos de la marca Volkswagen que integran la flota de la compañía.
En palabras de su presidente, Egbert Miebach:
“Estamos profundamente decepcionados con Volkswagen y nos sentimos dejados y engañados“.
La empresa razona cómo una de los principales motivos a la hora de decantarse por los vehículos de la automotriz germana, fue el componente medioambiental, extremo que, además, quedó reflejado por escrito en un acuerdo.
Volkswagen ha rehusado realizar declaración alguna al respecto, al menos de momento.
Por lo que parece, los particulares en el viejo continente han dejado de ser los únicos que deciden llevar a la multinacional ante los Tribunales de Justicia.